30 de septiembre de 2016

MIS OFENSAS

                  MIS OFENSAS



     Y pensar que 50 años son casi nada, difíciles de deglutir. Y en el masticar diario, granos de arena en los dientes. Son los castigos por no seguir la corriente, lo fácil, lo útil, lo efímero, lo practico, lo mas rentable a los ojos del buen pastor. El que te enseña, el que te guía, el que te reprime con su inacción cuando ve, que te saliste de la huella. 

     Como caballo con hambre y muerto de sed, se rebelan las almas enardecidas por infortunios, hasta que el pecho arrastrado, sangra, por las piedras del atajo, del desvió.

     Para todo aquel que se crea dueño de su destino, y, aunque la soledad lo apañe, su conciencia, lo afrentara en la retirada. Por no padecer, por no soportar, por no aguantar, las reglas divinas.



                                                   FIN


Por: Jorge Godoy
En Buenos Aires, setiembre 2016



Estimado Lector muchas gracias y hasta la próxima entrada

1 de septiembre de 2016

TERQUEDAD (cuento de pasada)

 TERQUEDAD
     (cuento de pasada)


                                                                                  Por: Jorge Godoy




     Al Niceforo siempre le había apasionado eso de andar arreglando cuanto aparatito electrónico le caía a sus manos, trajera quien lo trajera para su arreglo, para el significaba un nuevo y atrayente desafió.  Su pasión por la electrónica hizo que un buen día arrancara decidido no solo a meterle mano a todo, sino que se le había metido en la cabeza que a partir desde ese entonces, con ese trabajo ya no pasaría mas hambre. Saldría de la mishiadura, tal como lo tenia pensado desde hacia muchos años. De a poco fue acumulando aparatos de toda clase, radios, tocadiscos, televisores y muchos otros componentes. Y como un tesoro ya llevaba guardado mas de cien, todos descompuestos y para arreglar. Apilados en los cuatro rincones de un tallercito hogareño de electrónica montado de imprevisto que algún vez había soñado que funcionaria a pleno para solventarse económicamente y que con la esperanza jamas perdida, pensaba, algún día solventaría también todos los gastos con cierta comodidad para la buenaventura de toda su familia. 

     Si el cansancio jamas había podido con el, fue porque su terquedad ya se había apoderado completamente de su cabeza. Así y todo y a pesar de sus grandes defectos, muchos de nosotros, sus amigos de toda la vida, aun lo recordamos con una gran admiración por su tenaz y constante labor tratando día a día de recomponer esos viejos aparatos electrónicos que le sabían traer sus vecinos. Insistiendo en su ignorancia en el afán de arreglarlos sin cambiar siquiera alguna pieza. 
     No había forma de hacerle entender que en la electrónica, si alguna pieza comenzaba a fallar y después se quemaba, era ya inútil tratar de repararla, todos le aconsejábamos que no le convenía económicamente y que lo mejor eran los reemplazos por piezas nuevas. 

     Al Niceforo no le alcanzo la vida para terminar de aprender que nada es insignificante en esta vida y que aunque muchas cosas a veces pudieron parecerle fáciles, nunca lo fueron. Ojala el hubiera ido a aprender un poco mas de electrónica, se hubiera actualizado, era lo que a el le faltaba, tal como se lo habíamos aconsejado en mas de una oportunidad, quizá de esta forma hubiera aprendido también que nunca habían estado de mas todos los consejos que siempre le dimos los amigos que estuvimos mas cerca de el hasta ese día demasiado triste en que el se nos fue para siempre.


                                                                FIN


Estimado Lector muchas gracias y, hasta la próxima entrada.

4 de julio de 2016

HEROES ANONIMOS



               HEROES ANONIMOS


                                                                  Por: Jorge Gogoy


       Tiene que ocurrir algo fuera de lo común, que tenga que ver con los héroes, que cambie el mundo en que vivimos.

       Ya es tiempo de que ocurra algo especial, nuestro héroes de a poco se están muriendo, de Los Beatles solo quedan 2 y ya están viejos, los Rolling también, Queen no existe mas, Credence tampoco, eso es en lo que a música uno se refiere

       Ya no están  jugando Pele, ni Maradona, Beckenbauer, Rossi, Cruyff, y muchos otros mas .


       Ya no están Picasso ni Dali.
  
       Se nos fueron actores, los tres Chiflados, el gordo y el flaco, Chaplin, Jhon Wayne, el Chavo, Cary Grant, Marilyn, Shirley, Karloff, Price, y tantos otros 

       Rambo, rocky, superman, batman, Donald, Mickey, Terminator, etc,

       Borges, Neruda, Cortazar, Marquez, Machado, Hernandez, Nervo, Jimenez, y cientos mas.

       Y en otras artes, se han ido muriendo de poco con el pasar de los años, grandes ejemplos para imitar, mirarse en ellos, reflejarse, parecerse. Soñar que podíamos ser como ellos.

       Sin embargo, la vida continua, hay otros héroes, no tan de renombre pero héroes al fin. Mas anónimos para nosotros los mas viejos y que sin embargo llegan a los de menos edad.

       En fin, esperemos los mas viejos que sucedan milagros y antes de morirnos lleguen algunos héroes que puedan entretenernos mucho mas tiempo que los actuales, que aparte de ser mediocres, aparecen y desaparecen en poco tiempo. 

                                                  FIN

Estimado Lector, muchas gracias y hasta la próxima entrada.
        

25 de abril de 2016

LA HERRADURA (Juegos)

   LA HERRADURA 
       (JUEGOS)
                                          Por: Jorge Godoy
                                         
       
      Encontrar una herradura tirada en el suelo, siempre nos trajo buena suerte
     
      Los tiempos han cambiado, ha cambiado tanto que ya ni se ven herraduras perdidas en las calles.          
      Hace mucho tiempo atrás, cuando eramos chicos, sabíamos encontrar muchas de ellas, enseguida las levantábamos para llevarla a casa, era como un trofeo. Sabíamos que ella era de traer buena suerte para el que las levantara. Solo teníamos que fijarnos bien que esta tuviera siete agujeros, si no tenia siete agujeros, no era de traer suerte. A veces se encontraban de seis y otras de ocho agujeros, estas no nos servían para colgar en la pared de casa, porque solo las que tenían siete agujeros traían buena suerte. 

      Entonces las que no tenían siete agujeros solo nos servían para jugar. ¿Y como jugábamos con ella? Muy sencillo: Hacíamos una raya derecha de un metro, mas o menos en la tierra, para indicar que hasta ahí era el lugar permitido hasta adonde podían llegar nuestros pies, si pisábamos la raya el tiro era invalidado, así que teníamos que tener mucho cuidado de no pisar la raya del suelo. 

      A unos 5 metros clavábamos un hierro largo de un metro en el suelo con un martillo, dejábamos que este sobresalga la mitad y la otra mitad quedaba oculta en la tierra. Podían jugar varios jugadores, por turno iban tirando hasta que la herradura era embocada en el hierro. Se ponía difícil muchas veces, la herradura daba vueltas el hierro y luego se salia de el. Se consideraba un tiro acertado cuando la herradura quedaba cubriendo el hierro. 
      Se jugaba por monedas. Cada jugador ponía una moneda de diez pesos por cada juego, que al final se lo repartían entre los que habían embocado el tiro. 



      Juegos mas, juegos menos, los juguetes de antes eran mas baratos y hasta mas ingeniosos, cuidábamos la ecología y de paso nos ganábamos unos pesos.


                                            FIN



Estimado Lector, muchas gracias y hasta la próxima entrada.



                       

3 de abril de 2016

VIEJO MOLINO DE AGUA

   
                           VIEJO MOLINO DE AGUA

                                                          

           El viento de la costa, al caer las primeras oscuridades, agita con mas intensidad sus viejas y oxidadas aspas. Como un gigante que nos da miedo, erguido, el, orgulloso, allí delante de nosotros dos, mocosos, lo desafiamos. 

       Primero, a no tenerle mas miedo a su figura sombría, en la oscuridad, y luego, sometiendo a prueba a nuestros oídos, para soportar sus temibles quejidos.

       Dos rebeldes, pequeños de estatura, que nos acercamos con mucho temor pero con gran valentía, hasta tocar con nuestras manos, cada uno, sintiendo la frialdad de sus hierros, apretándolo, intimandolo, a que comprenda de una buena vez que ya no somos tan niños, para seguir creyendo que por las noches horribles de intensos temporales en nuestro campo, todavía nos asustas, como hacías antes, cuando volvíamos asustados, corriendo desesperadamente al refugio de nuestro hogar.
                    


                                                       FIN




Estimado Lector, muchas gracias y sera hasta la próxima entrada.                                                                                            
De:  Jorge Godoy
En Buenos Aires, abril de 2016

23 de enero de 2016

DE CALORES INTENSOS


                   

                                            Por: Jorge Godoy


         Aquel que en los días calurosos de verano, no le conoció una teta a la María, seguro, no había nacido en mi pueblo.
         El viento entraba en mi pueblo tan débil e insuficiente, y adonde terminaba, se ponía a luchar con un par de retamas, que eran la últimas que sabían hacerle obstáculo.
         Hablar de las alambradas, era hablar del tiempo largo de trabajo que uno tenia que tomarse para ir llenándolas de plantas trepadoras, y plantarlas de tanto en tanto por si uno quería sentarse a descansar un rato a la sombra y apoyar sin quemarse la espalda sobre los alambres.
         Así de bruto era mi pueblo, mi país. Y hacerse amigo de esa escasa naturaleza, significaba, ser un hombre rico, vivir mucho mejor. Después de todo, Dios había hecho las plantas para que el hombre las aprovechara, sobretodo en ese lugar adonde las sombras, no fueron ajenas a la codicia de los seres humanos.
         Y alguna que otra gallina por acá, y otra mas allá picoteando el suelo seco y abierto en grandes surcos, todo resquebrajado, pidiendo como de costumbre para esas épocas, al agua, al igual que nosotros, a los gritos.
         
           

         Estimado lector, muchas gracias y hasta la próxima entrada .